Desde hace un tiempo se están poniendo de moda proyectos colaborativos en la red de diversa índole, donde un grupo de profesionales interactúan aportando ideas y desarrollos en grupo que desarrollan conocimientos y puntos de vista diversos para que los demás puedan consultarlos mientras que ellos se dan visibilidad y se crean una marca personal.
La verdad que esto es muy positivo, siempre y cuando queden claras desde un principio las pautas y reglas. Normalmente, la idea suele partir de una persona que piensa en un grupo de colaboradores en función de lo que puedan aportar. Normalmente, la colaboración suele ser altruista ya que a los que colaboran les aporta reconocimiento y movimiento en la red que siempre va bien.
El problema surge cuando estos organizadores son meros charlatanes de feria que, amablemente llamo “vendedores de humo” o “chupasangres” ya que pretenden aprovecharse del trabajo altruista de los demás, sin ayudarles ni darles ningún reconocimiento por su labor. Eso sí, después son los que se llevan todo el mérito y los contactos que consideran “su tesoro” y no comparten con el resto del grupo.
Inicialmente, cuando te contactan, te hablan el proyecto, os comentan los cuantiosos beneficios que se obtendrán de forma indirecta que luego, conforme va pasando el tiempo, no se ven por ningún sitio. Además, una vez que ya habéis comenzado, suelen exigiros como si fuese una obligación porque, supuestamente, tenéis tiempo; no olvidéis que vuestro tiempo se debe valorar de alguna forma. No debéis subestimar vuestro trabajo ni ser excesivamente humildes porque este tipo de “personajillos” se aprovecha de esto. En los trabajos colaborativos en grupo y altruistas, si hay algún tipo de reconocimiento o beneficio, debe afectar a todos los integrantes del proyecto en la misma medida.
Un buen organizador de este tipo de proyectos o ideas, desde el principio, os dirá lo que hay de forma clara y lo que os puede conllevar el colaborar en un futuro, sin prometer cosas que no están seguras. Luego, si están contentos con vuestros aportes y profesionalidad, irán contando con vosotros más y más, pasándoos contactos y proyectos que son, de alguna manera directa, recompensa a un trabajo bien hecho.
Hoy en día, hay muchos profesionales de multitud de sectores que, al estar inactivos laboralmente, han de arriesgarse y participar en proyectos en la red porque da visibilidad para buscadores de talento en el ojo que todo lo ve. Inicialmente, tocará demostrar la valía y ganas porque las oportunidades salen muchas veces de estas colaboraciones aunque, a priori, no sean recompensadas. Mientras los organizadores os pasen contactos y os mantengan informados de nuevos proyectos, todo irá bien porque ahí esta el lema “hoy por ti y mañana por mi”
Los “chupasangres”, por el contrario, van poniendo excusas a lo que os prometieron y consiguen que, al final, la gente se canse porque ven que no le aporta nada y tengan que buscar nuevos colaboradores; vuestro tiempo lo debéis aprovechar en cosas interesantes para vuestras aspiraciones porque para peder el tiempo y el dinero siempre lo podéis hacer por vosotros mismos.
Luego, el tipo vendedor de humo es este tipo de personas que se aprovechan de las necesidades de los demás en épocas de carencia de trabajos y van vendiendo proyectos de trabajo en los que sólo necesitan personas con ganas de trabajar y con una mínima aportación os prometen que os vais a forrar porque tienen el negocio del siglo. Suelen ser personas que sus mensajes suelen estar llenos de mensajes carentes de contenido, que tienen mucha palabrería barata que no dice nada. Así que cuidado con dejarse embaucar porque, a veces, la desesperación os puede hacer participar en proyectos que os dejen peor de lo que estáis inicialmente. Así que antes de embarcaros, pensad con sentido común desconfiando de los chollos rápidos.
El mensaje que intento transmitiros es que vuestra disponibilidad de tiempo, aunque la tengáis, es igual de importante que la de los que suelen capitanear estos proyectos. Porque todas las participaciones en proyectos, sean mediante la búsqueda de contactos, aportando artículos, elaboración de seminarios y charlas, críticas o recomendaciones de material de cualquier área, requiere esfuerzo y dedicación por mucha facilidad que tengáis. Y eso os lo deben valorar de alguna forma, acordándose de vosotros cuando lleguen los beneficios o reconocimientos. Si esto no ocurre, lo mejor es que deis carpetazo a las colaboraciones en esos proyectos porque se están aprovechando de vuestra buena voluntad y talento.
No olvidéis que colaborar con una persona humilde, refresca la mente y lo contrario produce verdaderos mareos y dolores mentales.
¿Cómo son los vendedores de humo que conocéis?
Interesante post Juan sobre el que estoy de acuerdo, sin embargo em gustaria hacerte una pregunta.
Estoy montando una empresa con pocos recursos iniciales. Hace poco me enteré de que una amiga mia estaba sin trabajo, me hubiera gustado contratarla pero por el momento no tengo recursos para ello.
Le ofreci la posibilidad de trabajar conmigo en dos sentidos:
Uno ejerciendo labores comerciales en base a una comision
Otro ayudandonos a desarrollar proyectos cuando nos veamos saturados de volumen de trabajo tambien en base a una comision
(hablo de comisiones de entre el 30 y el 50%)
Esta oferta era solo hasta que encontrase algo o yo pudiera ofrecerle una incorporacion a mi empresa
Por favor, con toda sinceridad, consideras esta practica de «chupasangres»?
Seguire tu blog
Hola Jaime,
Gracias por participar.
Para nada considero que lo haces con tu amiga sea una actitud chupasangres. Porque desde el primer momento le comentaste lo que había y lo que le podías ofrecer. Más sincero no as podido ser y as sido flexible dejándole margen para que cuando encuentre lago más acorde a su perfil pueda irse.
Saludos y ánimo con tu proyecto.
Juan
Gracias por tu rapida respuesta
Un saludo
Excelente descripción Juan, desgraciadamente me he encontrado algunos de estos que describes. Lo bueno es que poco a poco se les va viendo el plumero… he recomendado tu post en mi twitter 😉 @jimmypons un saludo desde la sierra de madrid.
Hola Juan,
Efectivamente ahora el ‘trabajo en red’ está a la orden del día, y es bueno tener criterios para confrontar actitudes concretas.
Hay que balancear aportación y retorno, como en cualquier otra aventura, y la inversión inicial en tiempo, dedicación e ilusión naturalmente también cuenta.
Creo que la definición inicial de los objetivos de la red es crucial: entre el think-tank puro y el negocio puro hay muchos matices que son los que llevan a malentendidos (o son utilizados por los piratas).
Muchas gracias por el recordatorio, es fácil olvidar lo evidente…
Un saludo,
Jaime
Hola Jimmy,
Por supuesto, tiene que existir de todo, sin embargo, se les ve enseguida el plumero del que van.
Gracias por recomendar el post en twitter.
Saludos,
Juan
Hola Jaime,
Efectivamente ambas partes deben estar en el mismo canal y comunicarse adecuadamente desde el principio para que todo este claro.
Saludos,
Juan